La Junta directiva de COVITE quiere expresar su consternación y profunda tristeza por el fallecimiento de un amigo, un compañero y una buena persona: nuestro directivo, Fernando Altuna Urcelay.

Fer no era sólo uno de los nuestros, sino el más lúcido, el más perseverante, el más incansable. Desde que entró a formar parte de COVITE, lo dio todo por lo que creía que era una causa justa: la memoria de las víctimas, su derecho a la justicia y a la verdad, la batalla contra los que justifican el odio, la violencia y el terror que él había sufrido en primera persona cuando ETA asesinó a su padre, el capitán de la Policía Basilio Altuna, en 1980. Ahora COVITE tiene una razón más para seguir trabajando: se lo debemos a Fer.

 

Fer