• El Colectivo insta al Gobierno a abstenerse de celebrar actos propagandísticos y a focalizar sus esfuerzos en detener a los etarras prófugos de la justicia

  • Denuncia el fracaso rotundo del Estado de derecho con las víctimas de ETA, puesto que a más de la mitad se les han negado sus derechos a la Verdad y a la Justicia
  • Recuerda que la verdadera derrota de ETA conlleva necesariamente la deslegitimación del terrorismo y de su proyecto político, que hoy se sigue defendiendo en las calles y en las instituciones

El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (COVITE) no ha querido asistir al acto de destrucción de armas de ETA y de los GRAPO que se celebrará hoy a las 12:00 en el Colegio de Guardias Jóvenes “Duque de Ahumada” y que estará presidido por el presidente del Gobierno y el ministro del Interior. COVITE denuncia que la celebración de este tipo de actos “propagandísticos” tienen como objeto ocultar el “rotundo fracaso” del Estado de derecho con las víctimas del terrorismo, especialmente con las de ETA, a las que a más de la mitad se les han negado sus derechos a la Verdad y a la Justicia. “¿Cómo vamos a ir a un acto público en el que se destruyen las armas con las que han asesinado a nuestros familiares? ¿De verdad alguien cree que esto es motivo de celebración?”, se pregunta Consuelo Ordóñez, presidenta de COVITE. “Jamás iríamos a un acto público en el que se destruyen pruebas que han podido servir para esclarecer los asesinatos de nuestros familiares. Nos han asegurado que las armas que se van a destruir ya no tienen valor judicial para futuras investigaciones, pero es lógico que tengamos dudas sobre si servirían para esclarecer alguno de los más de 350 crímenes de ETA que todavía están sin resolver”, asegura Ordóñez.

COVITE recuerda las alarmantes cifras de impunidad de los crímenes de ETA. En 2018 el Colectivo hizo pública una investigación judicial de las sentencias de los crímenes de ETA, a través de la cual constató que, de un total de 362 asesinatos de ETA con sentencia y, por tanto, considerados resueltos, solo en 24 de ellos han sido condenados todos sus responsables: autores materiales, colaboradores necesarios, cómplices y autores intelectuales. Por tanto, el Colectivo denuncia que “además de los crímenes que ni siquiera han sido investigados y juzgados, debido, en la mayoría de los casos, a graves negligencias que se han cometido a lo largo de todos estos años, hay que sumar a la cifra total de impunidad todos los crímenes en los que no han sido procesados y juzgados todos los culpables”. Desde el Colectivo insisten en que “nunca nos encontrarán en ningún acto en que se escenifique la supuesta derrota de ETA a manos del Estado de derecho, porque la escenificación real es la de la falta de justicia que han recibido las víctimas de ETA”.

COVITE también ha criticado que el Gobierno “continúe ahondando en la supuesta disolución y entrega de armas por parte de ETA”, cuando en realidad han sido “falsos desarmes” y “un teatro de autodisolución” por parte de ETA. En este sentido, COVITE se ha referido a los actos que organizó la propia ETA para escenificar, por un lado, su desarme en Bayona en el mes de abril de 2017, que fue puesto en entredicho por la lucha antiterrorista francesa; y, por otro lado, a la autodisolución de la banda terrorista, que tuvo lugar en localidad francesa de Cambo-les-Bains en mayo de 2018. “¿Desde cuándo las organizaciones terroristas se autodisuelven?”, ha cuestionado Consuelo Ordóñez. “La verdadera disolución de ETA se producirá cuando las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado detengan hasta el último terrorista huido”, ha afirmado Ordóñez. “Urgimos al Gobierno a que lleve a cabo la operación policial de disolución de ETA”.

Asimismo, COVITE ha remarcado que la derrota de ETA –que supuestamente hoy se escenifica– conlleva necesariamente la deslegitimación del terrorismo y del proyecto político de ETA. “Los objetivos políticos por los cuales ETA asesinó a nuestros familiares siguen vivos y hoy los defiende EH Bildu desde las instituciones. Siguen justificando los asesinatos, los atentados con heridos, los secuestros, las extorsiones, las amenazas y el exilio forzoso de miles de familias para escapar de su terrorismo. Y provocándonos al llamar ‘presos políticos’ a los asesinos de nuestros familiares”, han denunciado desde COVITE. “La verdadera derrota de ETA pasaría por el aislamiento a los violentos y la deslegitimación del terrorismo, lo cual desgraciadamente no es una prioridad para este Gobierno”, ha asegurado Consuelo Ordóñez.

COVITE ha reivindicado que las víctimas del terrorismo no necesitan actos de propaganda política, sino que se satisfagan sus derechos a la Verdad y a la Justicia. “La justicia y la derrota de ETA pasan por que haya una verdadera voluntad política y judicial de detener a las decenas de etarras que todavía hoy permanecen huidos, por tratar de esclarecer los más de 350 crímenes por los que nadie ha pagado nunca y por deslegitimar el proyecto político de quienes siguen justificando los crímenes de la banda terrorista ETA”, han defendido desde COVITE.