COVITE desarrolla e impulsa investigaciones de alto nivel destinadas a contextualizar el fenómeno terrorista, a prevenir la radicalización violenta y a construir Memoria en torno a los damnificados por ataques terroristas.
Investigación
El presente estudio, elaborado por la abogada y consultora internacional Irene Muñoz Escandell, tiene como objetivo general promover la inserción de la dimensión de género en las normas, políticas, programas y proyectos para la protección, reconocimiento y memoria de las víctimas del terrorismo. Esto implica tener conciencia de cómo se articulan las relaciones de género en todos los ámbitos y cómo crean y perpetúan desigualdades entre mujeres y hombres que, por tanto, tendrán también consecuencias en el transcurso de sus vidas tras haber sufrido un atentado. En definitiva, la adopción de la perspectiva de género supone asumir que no existe la neutralidad en ningún ámbito de la vida humana y es preciso tenerlo en cuenta para no generar quiebras en los derechos de las personas.
El objetivo específico es que se desarrollen normas, modelos y principios de gestión eficaces que incorporen el análisis de género en la práctica de los diferentes agentes sociales:
● Personal técnico de las Administraciones Públicas y entidades o agentes que participan de un modo u otro en el diseño y gestión de políticas, programas o proyectos dirigidos directa o indirectamente a la protección, reconocimiento y memoria de las víctimas del terrorismo;
● Personal del mundo académico, educativo e institucional que se ocupa de la difusión de la memoria en materia de terrorismo, así como de la sensibilización y la concienciación al respecto y la prevención de la radicalización violenta;
● Responsables políticos que tienen en sus manos la aprobación de las normas, que son reflejo de las políticas públicas.
Al mismo tiempo, se espera que este documento constituya un instrumento de concienciación y sensibilización para las propias víctimas del terrorismo y población en general. De este modo, la consideración de las desigualdades de género como un problema social en el que las víctimas del terrorismo no constituyen, por decirlo de algún modo, un “grupo exento” permitirá no solo visibilizar el problema, sino también determinar las causas del mismo y, por tanto, llevar a cabo las actuaciones necesarias para afrontarlo y eliminar o disminuir sus consecuencias.